domingo, 31 de enero de 2010

El Alquimista

Hace algunos años alguien me regaló “El Alquimista”. Un libro más. Con el paso del tiempo y algunas experiencias a la espalda, empecé a pensar que quizá El Alquimista no era un libro tan simple, no era únicamente un cuento, sino una enseñanza para la vida, una serie de consejos que han ido acompañándome desde entonces.

Santiago era un pastor que tuvo un sueño. En él vio unas Pirámides que escondían un tesoro y comenzó un viaje en busca del mismo. Pero en realidad, el tesoro, era su Historia Personal.

Y me siento como ese pastor, buscando mi Historia, leyendo las señales. “Las cosas sencillas son las más extraordinarias y sólo los sabios consiguen verlas”.

Llevo mucho tiempo dando patadas a las piedras, danzando de un lugar a otro, buscando mi sitio sin dar resultado. Al igual que Santiago, “trabajé durante mucho tiempo para hacer realidad un sueño y ese sueño, a cada momento, iba perdiendo su importancia. Tal vez porque no era mi sueño”.

“En un momento determinado de nuestra existencia perdemos el control de nuestra vida y pasa a ser gobernada por el destino. Esta es la mayor mentira del mundo”. Y después de cada tropiezo, volvía a resurgir de las cenizas como el ave fénix y seguía buscando el lugar donde quería llegar. Y me equivocaba una y otra vez.

Pero he aquí que acabé en el mismo punto del que partí hace muchos años. Y las señales me llevaron a Nicaragua. “Las decisiones son sólo el comienzo de algo. Cuando alguien toma una decisión, en realidad está sumergiéndose en una corriente poderosa que lleva a la persona a un lugar que nunca había soñado a la hora de decidir”. ¿Quién iba a decirme hace 6 meses que me marchaba a Nicaragua? Me habría reído en su cara, ciertamente.

Pero ahora, a falta de 19 días para embarcar en un avión y cruzar el charco sólo veo una cosa: que quizá esta es mi Historia y “cuando tú quieres una cosa, todo el Universo conspira para que realices tu deseo”. Si de algo estoy segura es de que todo lo que he vivido tenía que traerme aquí. “Mi corazón está donde está mi tesoro y mi tesoro necesita ser encontrado para que todo lo que he descubierto en el camino pueda tener sentido”.

“No vivo ni en el pasado ni en el futuro. Tengo sólo el presente y sólo él me interesa. Si puedes permanecer siempre en el presente, entonces serás un hombre feliz. En el presente es donde está el secreto; si quieres prestar atención al presente podrás mejorarlo. Y si mejoras el presente, lo que sucederá después también será mejor”. Esto es precisamente lo que intento: cambiar el presente para que el futuro sea mejor. Algunos pueden pensar que esto es una utopía, pero “es precisamente la posibilidad de realizar un sueño lo que hace la vida interesante”.

Ahora sólo me queda aprovechar estas dos semanas, abrir la mente, ver más allá, empaparme de todo y de todos y esperar. “El que vive su Historia Personal sabe todo lo que precisa saber. Sólo una cosa hace imposible un sueño: el miedo a fracasar”.

lunes, 25 de enero de 2010

Haciendo un balance...

Si tuviera que definir con una palabra este fin de semana sería INTENSO. Intenso porque llevo demasiado tiempo aletargada en la rutina y estos tres días han supuesto el principio de algo que, a ciencia cierta, va a romperme los esquemas y a producir un cambio en mi vida sin posibilidad de retorno.

Guardo en mi “trastero” información en forma de imágenes que se suceden una tras otra: caras de niños sonrientes cuya mirada refleja lo que se esconde detrás de los ojos; una mujer que guarda en cada arruga de su rostro un pedazo de la historia de Nicaragua; casitas humildes de grandes familias (un valor cada vez más perdido en este nuestro mundo “desarrollado”); calles que muestran, como un arcoiris, toda una gama de colores; bosques de árboles frondosos; atardeceres cargados de emociones; volcanes y lagos; café y frutas,… Y detrás de cada imagen las vivencias y sueños de quienes un día se embarcaron en esta aventura que será también mi aventura.

INTENSO, porque conocí a las personas que van a acompañarme en esta experiencia. Catorce chic@s con los que he compartido momentos y sensaciones, con los que he trabajado para sentar los pilares de lo que será “Gansinos”, con los que he rememorado momentos de mi más tierna infancia,… En definitiva, personas con las que ha sido muy fácil mostrar no sólo cómo soy sino también lo que soy.

Creo que lo más bonito de este fin de semana ha sido la convivencia y el buen clima que se ha respirado en el grupo. Todavía queda mucho por hacer, pero estoy segura de que “Gansinos” va a representar lo mejor de cada uno de nosotros.

Voy a ir terminando, pero no quiero hacerlo sin dar las gracias a esos tres “jefes” que trabajan cada día para sacar adelante este proyecto y que son una fuente de conocimiento y experiencia. Desde este rinconcito, mi rincón, les doy la enhorabuena por su forma de trabajar y por todo lo que me han transmitido. Y, por supuesto, las gracias por darme la oportunidad de formar parte de esta familia.

Hasta la próxima.

sábado, 23 de enero de 2010

El comienzo de una aventura



Después de un proceso selectivo largo y difícil llega el comienzo de la aventura. Un viaje a Nicaragua que cambiará nuestra forma de ver el mundo, nuestra forma de pensar y seguramente nos haga crecer un poquito más como personas.

Este es el primer fin de semana de Formación para el Programa "Jóvenes Voluntarios con América Latina", desarrollado en Baños de Montemayor. He conocido al resto de mis compañeros de equipo, catorce personas que durante un mes serán mi familia, mis compañeros de trabajo, mi hombro en los momentos bajos y mis mejores aliados en los momentos de alegría.

Son muchas las expectativas puestas en este proyecto, muchas las ilusiones y ¿por qué no? muchos los temores. Pero las ganas de aprender y poder aprovechar la oportunidad que se me brinda en este momento supera todos los obstáculos.

Y por ahora no tengo mucho más que decir. Amenazo con seguir contando todas las aventuras y experiencias que me encuentre en el camino.

Hasta la próxima